domingo, 1 de abril de 2012

Banquete despedida de la Ciudad blanca


Arequipa es la segunda ciudad más grande del Perú. Por su arquitectura colonial fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad. Le dicen la “ciudad blanca” porque muchas construcciones están hechas con una piedra volcánica que abunda en la zona. Muy lindo lugar para pasar unos días. Nosotros llevamos más de un mes así que conocimos algunas cosas más que cualquier turista.

Nos cuentan que la ciudad trató de independizarse del país y que la gente arequipeña no es muy confiable que digamos, cosa que tuvimos la suerte de no comprobar. Acá, como en todo el país, tienen sus propios términos, por ejemplo:

“Se rompió el auto” se dice: “Se malogró el carro”
“Ningún problema, tranquilo” se dice: “normal”
“Escuché, ya entendí, está claro” se dice: “iáiá”

Ellas en el distrito de Yanahuara.

Poli de tránsito amistoso.

Un típico patio interno del centro.

Construcción en sillar, centro histórico.

Por avisos clasificados, comprate "El Pueblo" del domingo.

La plaza matriz y la Catedral, centro histórico.

El Misti, uno de los tres volcanes que rodean Arequipa.

Un pisco sour de colado en un catering municipal.

Por seguridad, tomate un taxi de Taxitel o Turismo Arequipa.

Las combis te llevan por 80 centavos y pagás cuando bajás.































Aunque nos acabamos de conocer, la familia de Edgar nos recibe en Arequipa como si fuéramos parientes recién llegados. Rosa, de mirada sonriente y una generosidad de esas tan grandes que te dan vergüenza seguir aceptando. Y sus tres hijas, tan distintas como sus propias y auténticas maneras de ver la vida: Gaby sueña. Paola estudia. Fabiola se ríe.

Durante varios días, en la sede arequipeña del restaurante familiar, probamos unos 30 platos diferentes mientras les hacemos fotos y videos de promoción. Las bandejas repletas de lo mejor y lo más típico de la comida peruana llegan a la mesa y salen pidiendo auxilio. Con todo el tiempo del mundo comemos a cuatro manos los platos más ricos que existen. Es un auténtico banquete que me ayuda a recuperar algunos kilos que había dejado en el camino.

Mientras tanto, en el taller, llegan los repuestos y terminan de arreglar la camioneta. Nos vamos de la Ciudad blanca con la panza llena y el corazón contento. Sobre todo porque descubrimos en Arequipa uno de los motivos por los que valió la pena haber empezado el viaje: esta familia que sentimos como propia.


La familia unida: Rosa, Fabiola, Edgar, Paola, Gaby y nosotros (Martina estaba por ahí).


Marti en acción 1.

Marti en acción 2.


Marti en acción 3: Rosa le muestra cómo hacer una comanda.
Pollo a las finas hierbas.








Saltado de verduras y carne.

Ceviche.

Taypa a la plancha.

Lomo saltado.

Kam Iu Wantan.


Parrillada.

Bife criollo con ensalada y papas fritas.

Arroz chaufa.

Típica preparación del cuy frito.

Algo muy rico que no me acuerdo cómo se llama.

Saltado de carne y verduras.

Cuy frito.










A punto de probar el cuy frito.